SIEMPRE


Oh preciosa hermosura
SIEMPRE poema de Francisco Alarcón Venezuela que mi libido enhiesta,
despierta de tu sueño que me tienes a tu lado
voltea tu cuerpo dorado

Arrinconado por mí, surcado en calados
mi mano siente tu calor día y noche
eres esponja de mis húmedas expresiones
siempre pendiente de mi fantasía y excitaciones

Te hallo en el recuento de las horas
Te sueño despierto en lejanía
Te huelo en sorpresa
cada vez que apareces

Como me gustas descalza, desnuda
sin enfados ni morales inexistentes
mofándote de los tontos agravios añejos
dispuesta en un tálamo a hacer el amor

de Francisco Alarcón

Tu Partida


Mientras se iba alejando
mi pulso sucumbía,
mientras se iba alejando
mi corazón casi no se oía.

Fue así en el día de su partida
su fuente luminosa se oscurecía.
Pensaba en ella, tratando
de hallarle con el pensamiento.

A los días vino
mi pulso latía
y mientras mas se acercaba
mi corazón moría.


Sueños de Agua pag 49 de Francisco Alarcón

Pornografía Lírica


Quiero verte desnudita, con el fruto en su plenitud
descubierto tu velo hasta al paladar
dando gritos, en alboreos los que vos queráis,
quiero verte en tu esplendor como dicen los poetas: bella flor

Preferida y con aquiescencia divina
para que el pudor se vaya lejos de la sal
Sabrosa, resplandeciente, espontánea sin imposturas
como Dios te puso en este mundo a pecar

Resuelta a todo, mirándome siempre de cerca
nada de parpadeos ni obnubilaciones;
propias pasiones son las que se producen abiertamente
suéltate el cinturón que ya no es de castidad

Deja rodar tu ropa en eternal riqueza,
adelante, atrás, voltea, mira y comienza de nuevo.
Aquí no ha pasado nada, raudamente emprenderé de nuevo mi afrodita sin igual
con nuevas intenciones y atrevidas caricias

Mañana será otra día, vamos a dormir apaga la luz…

Francisco Alarcón

Te invito

Te invito a quererme dama escalda
revitaliza mi entusiasmo, sueña conmigo,
siéntete en unión,
pasa tu esplendoroso cuerpo al calor del mío

Dame algo que modere mi pasión
entrégame el hermoso botón centro de tu corazón
excítame con el sabor de tus besos
guíame donde quiero ir

Déjame tocarte, déjame tentarte
tan bello jazmín que no prende en soledad
sino en tierra de heredad
especial para mí.

Quiero vivir el sueño o el apogeo de tu cuerpo
en retraído encierro mis afanes para decirte esto,
desviste tu cortejo, hazme el dueño de tus deseos
desata tu furia de mar sin olas que maten


Francisco Alarcón

Bautizo del breviario de la Antología Poética de Francisco Alarcón



15/08/07

Con plena asistencia se realizó el bautizo del breviario de la Antología Poética de Francisco Alarcón en la Librería Alejandría II en Caracas

En un cálido acto, dónde se reunieron representantes de los diferentes ámbitos del acontecer nacional, Carlos Padilla dio la bienvenida, Américo Martín brindó las palabras de presentación y todos celebraron con el poeta.

para ver la reseña del acto en detalle haga clic aquí

Voy

Voy de Francisco AlarcónVoy contento contigo hacia donde me digas
Voy contento contigo hacia el precipicio
Aun dormido voy contigo en el sueño índigo
mi diestra abraza tu himno en claro dominio

Vamos, iremos, encontraremos paz en el desierto
En la tormenta envolvente de la subsistencia
En el torrente de la resistencia que nos lleva a la muerte
En solícito espejo que descubre en encajes el martirio

Voy, soy, en sórdida esperanza el rumbo señero
Sueño que no despierta ni queriendo hacerlo
Esperanza erguida en las puertas de la vida.


Francisco Alarcón/ Encuentro pág 30

Con el alba de tus ojos

Con el alba de tus ojos de francisco AlarcónCon el alba de tus ojos
me mueves,
el mas tierno ensueño,
y el mas dulce amor.

Con tu alegría
la vida me bendigas
que son cualidades
que a vivir me obligas.

Qué fulgores diamantinos
circundan tu imagen,
dejando atrás lo plateado
de noche de plena de luna.

Nadie puede reemplazarte
ni en mi verso ni en mi amor,
y ante tu gracia rendido
mantengo mi turbación.

Francisco Alarcón /Ven niña pag. 48

Nunca

Nunca de Francisco Alarcon
Nunca antes se lo dije a nadie
y a ti te lo digo ahora,
cómo es de bella la vida,
cuando tu ser encaja.

Tus ojos con un esmero
tu linda cara un derroche
de finura impar,
que no provoca reproche.

Tus manos me asombran,
cuando perfilan sus gestos,
que dan firmeza
a todos tus bretes.

Tu boca rebusca mi beso
con absorbente candor,
y el sentido te fluye
con delicioso temblor.

En cada mohín de tus labios
con tu inclinación de cejas,
con el brillo de tu retina
son recuerdos que me dejas.


Francisco Alarcón/ Ven Niña pag 42

Me desbordo

Me desbordo de Francisco Alarcon
Me desbordo buscando,
los tesoros de la gloria,
mi palabra sueña estrenar tus oídos
con la fibra musical del pensamiento.

Talón de mi albedrío,
para buscarte con apuro,
vislumbro el primer encuentro
y siento que acaricio tu cuerpo.

Y también por insinuarte
de ese modo tan audaz
con que pasas por delante
al igual que por detrás.

Es que esta vida es austera,
ya no me puedo conformar
con esa rosa en primavera,
que solicita me das.

Francisco Arlacón/ Ven Niña pag 44


Búsqueda



Cansado estoy de cuerpos
ando buscando un alma
como quien en el bosque
busca poblados nidos,
pero eso si: esa alma
ha de llegarme en calma
y a 37 grados desnudos
y floridos.


Francisco Alarcón/Segundos Aires

Era Bella





Bella como la estrella era su sonrisa
fina como la aguja de mi destino,
como el hilo plateado de una cana
como el alma del nervio sensible.

Por eso regresé mujer, con ansia loca
a tus ardientes mimos de Citeres



Francisco Alarcón/Segundos Aires

A Ella

A Ella de Francisco Alarcón
Sin circulante ni activos fijos,
pero fiel a tu luz con mis respetos,
vengo a exponerte, amada, mis secretos,
como quien abre al sol sus escondrijos.

Nuestra casa sin ti tiene enredijos
y vacantes tan grandes, tan completos,
que llenarlos no alcanzan tus tantos hijos,
tus cuatro parientes y tus nueve nietos.

Vuelve ligero amor, vuelve, que ahora
mi hálito sideral, ido a la luna,
quiere de nuevo encontrarse con tu aurora.

Y así distingue, en rachas de fortuna,
en vez de aguantar veinte, hora tras hora,
resignarse a tu cruz, que es solo una.

Poema publicado en Sueños de Agua pág 28

Me equivoqué





Vidente como Cagliostro
celoso le cubrí el rostro
con un velo musulmán,
mas de nada me valió
pues el velo se le abrió
cuando vio a otro sultán.

Por tu amor

Foto Cronos Josue Mejía 10/2006

Con tu amor me es suficiente
con tu amor me colmé
con tu amor vivo
con tu amor razono.


Sin tu amor no hay quimeras
sin tu amor no hay sosiego,
sin tu amor no me hallo
A tu amor no declino ni desmayo.

Alucinación (libro)


Para comprar Alucinación haz clic aquí

No sé si soy digno de alguna historia o simplemente soy polvo y escoria, mi patria muere sin oír un solo lamento, al derecho o al revés muere una y otra vez...

por Francisco Alarcón

Quién

Quién te robó tu mirada,
tu figura, tu corazón de esmeralda,
tu hado de hada
y te dejo desnuda, casi sin nada

No es culpa tuya
no es culpa mía
son los crepúsculos,
que pasan desesperados.

Son los antes que nos demudan,
son los hoy que nos arrugan,
son los siempre que nos empujan
Y son los ahora que no dejan nada.


Extraído de SUEÑOS DE AGUA. Caracas: Comala.com, 2003. 72 p

Algo

Hay algo muy propio en nosotros
Ese algo somos tú y yo,
unión fresca para las tareas arduas
para el esfuerzo imperecedero

para echar la ceniza todos los días,
para lanzarnos mañana y tarde
en lucha meridiana,
despejando fluctuaciones, dando claridad

No en mezquino andar
se rige nuestra travesía
No buscamos la ventura egoísta
a razón del diluvio ajeno

Siento mi aproximación a lo que quiero
junto a tus valores y desvelos
Porque hay algo muy propio en nosotros
ese algo somos tú y yo.

Soneto

Cuando gusté su amor lo hice hasta el fondo,
me emborraché en el fuego de su vino
y me fue tan de encanto su camino
que me quede dormido en lo más hondo.

La Venus dibujaba en el plafondo
de su ideal palacio sibilino
era un sueño fantástico y divino
como el de las honduras de Macondo.

Pero seguí en las curvas de su río
pidiéndole más bien lo más sombrío
que su extensión de luna y azahares,

porque a la luz del éxtasis, tan muda,
prefiero en el jardín de mis pesares
su luz menos sutil y más desnuda.